¿Sabes de cuantas formas se puede abrir una ventana?
Practicable o abatible:
Apertura lateral de la o las hojas de la ventana. Las ventanas abatibles ocupan espacio al abrirse de modo que requieren no tener cerca ningún obstáculo que limite la apertura. El modelo abatible ofrece un ángulo de apertura total y cierre hermético.
Oscilobatiente:
Este sistema es uno de los más versátiles porque permite una apertura tanto lateral como inclinada hacia el interior. Esta última se utiliza mucho para ventilar la estancia sin necesidad de abrir la ventana. Proporciona el mejor aislamiento acústico.
Corredera:
Las hojas se deslizan de forma horizontal. No ocupa espacio adicional al abrirse lo que la convierte en perfecta para zonas limitadas por pilares, esquinas, muebles… Entre sus inconvenientes: el ángulo de apertura está limitado a una hoja, el cierre no es hermético y hay que retirar las hojas del marco para una limpieza total.
Batiente:
Apertura inclinada hacia el interior. Asomarse no es posible en este tipo de ventanas de apertura parcial recomendada para baños y garajes.
Osciloparalela:
Dos tipos de apertura en uno ya que combina la corredera y la inclinada hacia el interior.
Pivotante:
La hoja de la ventana gira alrededor de un eje central. Se utiliza en buhardillas, tejados…